Los patos de goma suelen ser amarillos porque este color evoca diversión, ternura y brillo, lo que resulta especialmente atractivo para los niños. Los patos de goma se diseñaron originalmente como juguetes de baño para niños, y el color amarillo brillante atrae fácilmente la atención y crea una sensación de limpieza y frescura cuando se combina con un ambiente acuático.
Además, el amarillo también crea un buen contraste con el agua y otros elementos del baño, lo que hace que sea fácil de ver y encontrar. Aunque los patos reales vienen en color marrón, verde o gris para combinar con su hábitat natural, el objetivo de los patos de goma no es parecer realistas, sino destacar y ser más amigables con los niños y los usuarios.